domingo, 9 de octubre de 2011

LA PULGA


En un lugar muy muy lejos al lado de un río que se encontraba en un valle que está oculto por un sistema de montañas muy muy altas esta una pequeña pulga llamada Arnold Schwarzenegger. Su padre, papa pulga, le puso ese nombre porque era fanático de las película de acción.

El pequeño schwarzenegger, al cual apodaremos con el nombre de “José” tenía un sueño; Quería subir hasta la cima de la montaña para ver que misterios se ocultaban más allá del valle en el cual había estado toda su vida. ¡Sus largos tres meses de existencia!

La pequeña pulga José creció escuchado historias deslumbrantes sobre los misterios que envolvían las tierras que estaban al otro lado del valle, decían que esas tierras estaban habitadas por gigantes de cuatro patas, pero que solo usaban dos para caminar, las otras dos la usaban para sujetar cosas.

Una mañana calurosa del mes de abril la pequeña pulga José le pidió a su amiga la garza que la llevara fuera del  del valle al otro lado de la montaña para comprobar si las leyendas eran ciertas, pero la garza trato de convencer a la pulga de que era un viaje muy arriesgado y que en vez de aventura lo que encontrarían seria la muerte, después de escuchar los argumentos de la garza la pulga le dijo algo que esta no pudo rechazar: "oye si no me llevas a la puta sima de la montaña te cortare las alas, las freiré y luego te las daré a comer" bueno realmente esto fue lo que pensó la pulga, pues al igual que su padre también era una pulga aficionada de las películas de acción, en verdad lo que hizo la pulga fue comenzar a llorar dándole tanta lastima a la garza que termino aceptando embarcarse en esta descabellada aventura.

De la pulga José no se sabe nada, pues esta nunca regresó, tampoco la garza, muchos dicen que ambas fueron asesinados por los monstruos de cuatro pata, otros dicen que le gusto tanto el lugar que se quedaron a vivir allí. Lo cierto es que la pulga José será siempre recordada como la pulga que abandono el valle para nunca regresar...



jueves, 6 de octubre de 2011

NO ES SUFICIENTE


No, pensarte no es suficiente. Si, ya sé que esta mente loca no distingue lo real de lo abstracto, que no importa que estés tan cerca como el aire que llega a mis venas y mantiene mi corazón latiendo, latidos que en más de una ocasión han sido por ti, pero pensarte no es suficiente, quiero tenerte en mis manos y convencerme de que eres tan real como la pluma con la que escribo y que tu no solo fuiste una excusa momentánea para sentirme bien, para llenar mi ego maldito y distraerme de la realidad. Y es que por más que me repito esta ecuación el resultado siempre es el mismo: pensarte no es suficiente.